

Luego de que en colombia y especialmente en Ibagué se reactivará un porcentaje de la economía, en sectores comerciales como el barrio Cádiz, las calles están invadidas de ventas informales que en su mayoría no cumplen con los protocolos de bioseguridad.
La proliferación de estas actividades tiene molestos a los comerciantes formales que además se siente preocupados debido que a que tanto sus empleados como clientes están expuestos a la contaminación del virus COVID-19 por la falta de medidas preventivas de los informales.
Al igual los empresarios son sometidos a una serie de requisitos para poder reabrir sus locales o negocios, protocolos que si cumplen como lo ordena el gobierno municipal, mientras que los informales no tienen ningún control ni vigilancia.
