




Demostrar que la agricultura orgánica o producción limpia es una alternativa de sostenibilidad económica y alimentaria, es para Guillermo Domínguez, un reto que no está lejos de cumplir en su finca de dos hectáreas.
Y es que en su finca en la verada Salitre Alto del municipio de San Luis (Tolima), este parece ser un proyecto disfuncional, pues todo a su alrededor se basa en la minería. Explotaciones de mármol que para sus vecinos es la única alternativa económica o por lo menos la más rentable, pero que para Guillermo no es una única verdad.
No contradice a nadie, y entiende a los mineros; pero con esa misma sabiduría, ve en sus más de 40 especies de verduras, hortalizas y frutas una oportunidad de hacer que el campo, no solo sea un buen vividero sino una empresa productora de semillas y productos de alta calidad nutricional.
El siguiente sueño es apostarle al ecoturismo de aventura. Llevar a sus visitantes a vivir experiencias extremas y seguras. Caminatas, camping, senderismo y encuentros fantásticos en armonía con la naturaleza.
Como joven innovador, Guillermo, también acude a la tecnología y desde sus huertas realiza en vivos por redes sociales, en Facebook por ejemplo como Guillermo Domínguez Buitrago, explica su proyecto, da consejos y hace la comercialización de los productos.