




Son ellos Norma Constanza y Franklin Montealegre, pareja de esposos que decidieron vivir en Panamá, pero debido a la pandemia retornaron a Colombia en donde hace aproximadamente dos meses iniciaron un emprendimiento creando derivados de la madera.
Entre sus productos elaboran patas a base de este material para después vender a los tapiceros. Pero este no es el único producto, también buscan aprovechar todas las partículas como el aserrín para producir abono orgánico.
El financiamiento de estos proyectos es el anhelo de esta pareja ya que han sido muchas las adversidades para lograr convertir una iniciativa en realidad. Motivo por el cual han acudido a varias entidades, pero no han logrado un patrocinio o una apalancamiento.
Hacen un llamado a la Alcaldía de Ibagué para que los incluyan en sus programas de desarrollo social o también a cualquier organización para encontrar financiación o incentivos para sostener a corto y mediano plazo su emprendimiento.


