En el corazón del Corredor Norte de Ibagué, una iniciativa ha transformado la forma en que se concibe el turismo en las áreas rurales. La Corporación Corpo San Bernardo ha venido desarrollando un modelo de turismo comunitario que no solo respeta la naturaleza, sino que también promueve el bienestar de sus visitantes y habitantes. Bajo el liderazgo de la doctora Marta Lucía Kitian, presidenta de Corpo San Bernardo, esta propuesta turística ha ganado reconocimiento a nivel nacional e internacional, destacándose por su compromiso con la sostenibilidad y la recuperación de saberes ancestrales.
Un modelo de turismo comunitario
La propuesta de Corpo San Bernardo tiene como eje central el turismo comunitario, un modelo que busca integrar a las comunidades locales en el desarrollo turístico, garantizando que los beneficios económicos y sociales lleguen directamente a ellas. Este enfoque ha permitido que más de 28 veredas del Corredor Norte, entre ellas San Bernardo, San Juan de la China y Salado, se sumen a un esfuerzo colectivo que combina agricultura, cultura y turismo. “Nuestro objetivo es reconocer un destino completo, no solo un sitio”, menciona la doctora Kitian, subrayando la importancia de articular esfuerzos para promover un turismo sostenible.
Respira Vida: Un enfoque sostenible
Uno de los programas más destacados dentro de esta propuesta es Respira Vida, lanzado en 2021, que se centra en reducir el uso de materiales contaminantes como el plástico de un solo uso y el icopor, además de eliminar las quemas en las áreas rurales. Este programa ha sido clave para posicionar al Corredor Norte como un destino turístico de naturaleza, atrayendo especialmente a visitantes extranjeros interesados en experiencias ecológicas.
Los turistas que visitan San Bernardo son clasificados por colores según su medio de transporte y el impacto ambiental que generan. Por ejemplo, los turistas “verdes” llegan caminando o en bicicleta, los “azules” utilizan transporte público, y los “naranjas” son aquellos que necesitan vehículos por razones de accesibilidad, como personas mayores o con discapacidades. Esta estrategia no solo fomenta el respeto por la capacidad de carga del territorio, sino que también impulsa el uso de transporte público, reduciendo la huella de carbono en el área.
Reconocimientos y alianzas
El impacto de esta propuesta ha sido tal que ha atraído la atención de universidades de todo el país, incluyendo la Universidad del Tolima, la Universidad Distrital de Bogotá y la Universidad de Cundinamarca. Estudiantes de agroecología y otras disciplinas visitan regularmente la región para aprender de las prácticas sostenibles que se implementan, desde la producción agrícola hasta el manejo ecológico del turismo.
En 2023, Corpo San Bernardo recibió el Reconocimiento a la Excelencia Empresarial y Ambiental otorgado por Cortolima, como parte del programa de negocios verdes del Ministerio de Ambiente. Este reconocimiento destaca la labor de la corporación en la aplicación de saberes ancestrales a la agroecología, un factor clave en la conservación de la biodiversidad y el bienestar de las comunidades locales.
El papel del cacao en la propuesta turística
Un aspecto interesante de esta iniciativa es la producción de cacao orgánico en la zona, un cultivo que se ha convertido en un bioindicador de la calidad del suelo y que ha sido motivo de estudio en diversas revistas especializadas del sector agropecuario. En el Centro Agrario de Cacao Orgánico (SICAO), se trabaja en la articulación entre la comunidad, la academia y las instituciones, promoviendo prácticas agrícolas sostenibles que respetan los saberes ancestrales.
Turismo saludable y bienestar
Más allá de las prácticas ecológicas, lo que realmente diferencia a la propuesta de Corpo San Bernardo es su enfoque en el bienestar integral. Los turistas no solo visitan un destino natural, sino que también experimentan un estilo de vida saludable, con alimentación basada en productos agroecológicos y actividades que promueven el contacto directo con la naturaleza.
“Nosotros no vendemos turismo, vendemos bienestar”, explica Kitian, destacando que la calidad del aire, del agua y del suelo en la región ha mejorado considerablemente gracias a las prácticas sostenibles implementadas. Este enfoque ha generado interés a nivel internacional, atrayendo a turistas que buscan una experiencia turística que no comprometa su salud ni la del medio ambiente.
Desafíos y apoyo institucional
A pesar de los logros alcanzados, la doctora Kitian reconoce que aún hay desafíos importantes, especialmente en términos de inversión en infraestructura turística en el sector rural. Si bien la Gobernación del Tolima y la Alcaldía de Ibagué han apoyado algunos de los proyectos de Corpo San Bernardo, se requiere de mayores recursos para poder consolidar el turismo en esta región como una fuente estable de desarrollo económico.
La propuesta turística de Corpo San Bernardo representa un ejemplo inspirador de cómo el turismo puede ser una herramienta para la conservación del medio ambiente y el desarrollo comunitario. Al integrar la sostenibilidad, la recuperación de saberes ancestrales y el bienestar, este modelo ha logrado posicionarse como un referente para el turismo ecológico en Colombia, demostrando que el turismo puede ser un puente hacia la paz y la prosperidad en las zonas rurales del país.
Para quienes deseen sumarse a esta iniciativa o conocer más sobre las experiencias turísticas en San Bernardo, pueden visitar el Instagram @DestinoSanBernardo, donde se comparten las actividades y experiencias que ofrece esta propuesta única.
