Ante la medida de la personería de Ibagué de suspender a la gerente del IBAL, Erika Palma, por tres meses por la presunta obstrucción a una visita del ministerio público a la planta de tratamiento de la Arboleda Campestre, algunos concejales se pronunciaron, en el caso de Santiago Molina, indicó que son medidas que se tiene que respetar.
Por su parte, William Rosas, muestra su preocupación por la situación, por las obras que se están ejecutando y que se van a entregar.
Por su parte, Carlos Beltrán, mencionó que la misma gerente tomó la noticia de la mejor manera, pues son medidas de los entes control.
Por ahora los concejales, califican que el rendimiento de la gerente ha sido bueno, pero que hay que esperar que otras medidas se toman por parte de la personería.
Más información en: