Ramón Bejarano, lleva más de 35 años viviendo en el barrio Clarita Botero, en la comuna dos de Ibagué, recuerda que hace unos años el centro de salud tenía las puertas abiertas para servicios primarios de salud, como toma de muestra, lo que facilitaba la atención para los sectores aledaños y las veredas, pero desde hace 10 años cerró sus puertas y no ha sido posible que regrese el servicio.
Olga Helena Gómez, presidenta de la Junta de acción comunal, explicó que han sido varias las solicitudes para la reapertura del lugar y que por lo menos en el año anterior se logró que se le realizara el mantenimiento al lugar, aunque falta el cielo razo y revisar una humedad que está afectando una de las paredes.
En promedio son 10 años con el lugar cerrado, y les preocupa que el estar sin uso pueda llevar a que el lugar vuelva a estar en el olvido, y por eso le solicita a la secretaría de salud, que tome las medidas necesarias para que funcione el lugar .
El centro de salud estaría habilitado para la atención de enfermería, un médico dos veces a la semana y la toma de muestras.
